La mayoría de las personas que están frente a una pantalla de ordenador durante largas horas experimentan fatiga visual y otras molestias relacionadas con la vista. Por eso, cuando utilizamos mucho tiempo el ordenador es importante cuidar determinados aspectos para salvaguardar nuestra salud visual. Tenemos que elegir bien el monitor o fijarnos en las características de la pantalla que lleva incorporado nuestro ordenador, ya sea PC o portátil; y también es importante calibrar adecuadamente la pantalla para garantizar que no cause daños en los ojos.

Calibrar correctamente la pantalla es un proceso que, además, ayuda a asegurar que la calidad de la imagen sea óptima y que los colores se muestran correctamente. Una pantalla mal calibrada puede mostrar colores demasiado brillantes, apagados o incorrectos, lo que a la larga será perjudicial para la vista. También puede causar fatiga ocular y dolores de cabeza.
En este post, vamos a enumerar algunas recomendaciones para calibrar la pantalla de tu ordenador, asegurarte de que estás viendo las imágenes de manera clara y precisa, y reducir los efectos perjudiciales en tus ojos, como la fatiga ocular.
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Ajusta el brillo de la pantalla: La pantalla del ordenador debe tener un brillo adecuado para que no sea demasiado reluciente ni demasiado tenue. Si es demasiado brillante, puede causar fatiga ocular, por el contrario, si es demasiado tenue puede causar tensión en los ojos. Ten en cuenta la iluminación en la habitación, para que el contraste no sea muy pronunciado.
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Ajusta la temperatura del color: La mayoría de los monitores tienen una opción para ajustar la temperatura del color. Acomódala para que sea más cálida en lugar de fría.
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Usa fuentes grandes y claras: Descarta las fuentes de poco tamaño y oscuras. No deben ser ni demasiado pequeñas o demasiado grandes y que sean fáciles de leer.
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Descansa tus ojos regularmente: Si trabajas durante largos periodos frente al ordenador, es importante descansar durante unos minutos cada una o dos horas.
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Parpadea con frecuencia: Este simple gesto ayuda a mantener los ojos húmedos y evitar la sequedad ocular. Cuando trabajas frente al ordenador, a menudo olvidamos parpadear, así que debemos intentar hacerlo de forma consciente e intencionada.
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Mantén la distancia adecuada: La distancia adecuada entre los ojos y la pantalla es un factor determinante. La distancia adecuada es de al menos 50-60 cm de la pantalla. Además, asegúrate de que la pantalla esté a la altura adecuada: el extremo superior de la pantalla en línea recta con los ojos o ligeramente hacia abajo, para reducir la tensión del cuello.
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Usa filtros de pantalla: Los filtros de pantalla pueden ayudar a reducir el deslumbramiento y la fatiga ocular. También pueden contribuir a reducir la cantidad de luz azul que emite la pantalla y los posibles daños a la vista.